Las carretillas elevadoras de GLP (gas licuado de petróleo) han ganado una gran popularidad en la industria de manipulación de materiales debido a su versatilidad, eficiencia y respeto al medio ambiente. Estas carretillas elevadoras funcionan con GLP, un combustible de combustión limpia que ofrece numerosas ventajas respecto a las carretillas elevadoras tradicionales alimentadas con diésel o gasolina.